El nombre de una persona, de un objeto, de un animal, planta, fenómeno, universo, es fundamental para encontrar significados, y al pensar en ello, reconozco que el nombre de mi cómplice de amores me llena de felicidad, me llena de vida, de energía, de luz.
Cada espacio de mi se cubre de caricias de sol, de luna, de luciérnagas.
Les comparto este poema que le hice al amor de mis amores, a la alegría de mi mirada, mi chico guapo.
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| Fotografía propiedad de BIGS Quito, Ecuador. |
No me voy de vacío
no me falta nada
todo se ha llenado de tu nombre.
Autora: Patricia Adriana Hernández