Papi:
Aquí estoy en un espacio en el que nadie sexualmente había ingresado
y entraste tú, estás tú, haciendo otra primera vez,
llenando de deseo este lugar, haciendo temblar mi piel
mi sexo húmedo, pidiendo a chorros tu verga
y necesitando con ansia tu vigor, tu voracidad
tu frenesí, tu extasis sobre mí, adentro de mí
sentirte caliente llenándome de tu leche...
Sentir tus manos estrujando mi cuerpo con la fuerza
de este encuentro, con las caricias que me das
fuertes y aguerridas. que me tienen tiritando.
Desde la mañana me sentí tan excitada por tus maneras
porque supiste darme lugar y escucharme,
porque pude expresar mis ideas y atendiste mi solicitud
con tan buena gana, que me dije este cabrón me ama un chingo
y zas, pasó, me prendí como cerillito y vi un videíto y dos y tres
y te miré a ti, todo cabrón y me excita que ese macho cabrío es mío.
Luego, llegas tú, ¿Cómo lo supiste?
¿Cómo chingados supiste que ocupaba tus cercanía, tu erotismo?
¿Me hueles, me presientes, me sabes?
Es que neta, me asombra, me gusta y me agrada que me adivinas
y yo siento , neta por detalles así me doy cuenta que te pertenezco
¿Lo sientes también tú? ¿Sientes esta pinche hermosa complicidad?
¿Te das cuenta que es super chingón?
Y llegaste, llegas y me dices esos juegos perversamente ricos,
travesuras de puto cabron, un macho que me excita, que me encanta
¿te habrás dado cuenta todas las terminaciones nerviosas que activaste?
¿Todas las ganas locas que me generaste?
La leche que me provocaste y el orgasmo rápido, fulminante y brutal
que me provocaste, y los olores que inundaste...
Ahora te amo mucho más, porque sé más quién es el hombre que me tiene
me gustas así, me fascina que me converses, que te develes...
¿Podrías decirme más de esos placeres que te gustan?
¿Conversarme a detalle, qué hiciste, cómo lo hiciste?
No quisiera porque no es mi estilo interrogarte
me gustaría que de ti naciera invitarme a ser tu cómplice,
aún más, mucho más cercana, hacernos más íntimos es tan rico
¿Lo notas?
¿Te estás dando cuenta mi cabrón como me estás cosiendo a ti?
¿Cómo mis pulsos y mis latidos de corazón y del clítoris
los tienes a tu modo, a tu antojo, a tu manera?
¿Cómo te me has metido en la mente y en el alma y me envicias de tu sexo
de tu afecto, de tu amor, de tu ternura, de tu pasión, de tu cariño?
Me tienes, soy de ti, tuya...
¿Sabrás que te pertenezco? No sé si notes cuan de ti soy
y que mi vida entera está a tu entrega, a tu disposición...
Te amo, dímelo así como lo haces siempre,
dímelo mucho, así cada te amo en palabra y en acciones.
¡Qué pinche feliz me hace pertenecerte a ti, a mi hombre!
Atentamente:
Tu Adri.