Ayer fue el día internacional de la mujer, y me sentí motivada a mandarle un ramo de rosas a mi mami y como siempre que compro algo para ella compro para mi mami suegra, también le mandé un ramo de rosas con un vino, ese para mi papi suegro en muestra del agradecimiento por el apoyo que le brindó a mi guapo con el problema de la camioneta.
No hubo rosas para mi mami suegra y se las cambiaron por 12 girasoles, en realidad dijo mi guapo que fueron 14, además le agregaron margaritas blancas y follaje. Realmente valió el cambio.
Mi mami se puso super feliz con su ramo, sé que ama que la consienta y como no hacerlo si es mi madre y le debo la vida, y todo mi desarrollo personal así como profesional. Siempre está ahí conmigo, me apoya, me guía, me encamina, me conoce y escucha, también me regaña y aconseja, en fin. Le amo absoluta y francamente. Dios me bendijo al ser su hija.
En el caso de mis suegros, según el audio que escuché y lo que me dijo mi guapo, disfrutaron mucho los obsequios y les sorprendí. Me alegro que haya sido así, porque de corazón los quiero mucho, les honro y les bendigo porque son los padres del hombre que amo y gracias a ellos, a su tezón y dedicación le han formado como un buen hombre con las cualidades y fortalezas que le admiro. Me siento agradecida que han hecho de él un ser humano íntegro.
El único detalle es que yo les digo suegros porque en México desde que uno es novia de alguien les decimos así, y no hasta que uno se casa. Yo soy la novia y la mujer de su hijo, porque mi alma, mi mente y mi cuerpo ya son de él, y está en todas esas áreas como dueño y señor, como amigo y compañero, como pareja y colaborador, somos equipo. Por tanto, me resulta super natural que mi cariño y mis apapachos se extienda hacia ellos y hacia mi cuñado de manera verbal y no verbal, es decir; con palabras y acciones.
Yo he decidido ser yo, tal cual al natural, como siempre, con mis modos y maneras, pero dispuesta a aprender y sobre todo a amar bonito a los que hacen mi mundo más cálido, a quienes me enriquecen el espíritu.
Mi Papi dijo que eso le gusta y esta bien, yo lo amo mucho, y ha ido adecuándose también a mí, sé que le soy valiosa y que me ama con todo su corazón.
De nadie he gozado tanto su amor como de él, con todos sus rincones que va abriendo poco a poco y me deja entrar, y me deja conocer.
Yo sé que tendré mis sueños hechos proyectos en él, porque quiero su vida en la mía, y la mía en la vida de él. ¿Se escucha bonito , a qué sí?
Bueno, en conclusión seguirán siendo mis suegros, porque eso es lo que son.
Atentamente:
Adri.